Vamos a ver en esta web toda la información que deberías saber sobre una operación de nariz, es muy importante que estés bien informado antes de dar el paso para evitar posibles disgustos o complicaciones.
¿Por qué debería hacerme una operación en la nariz?
Tal y como hemos comentado al inicio de este artículo, la rinoplastia tiene dos objetivos: Por un lado satisfacer deseos estéticos (hacer que tu nariz sea más "bonita" o que se parezca a la de otra persona, es decir, por cuestiones de belleza).Por otro lado arreglar malformaciones o problemas en la nariz que dificulten la respiración, es común encontrar este tipo de casos en recién nacidos con algún tipo de deformidad nasal y en accidentes donde se ha visto afectada la nariz.
Limitaciones que nos podemos encontrar
¿Hasta dónde podemos llegar con una operación de esta índole? ¿Cuáles son los límites? Para empezar no se debería realizar para imitar otra nariz ya que cada persona tiene unos rasgos característicos y una operación así debe tener en cuenta el resto de rasgos faciales para que el resultado "encaje" perfectamente.Además, no es recomendado realizarla en personas muy jóvenes (17-18 años o menos) ya que los huesos y cartílagos presentes en la nariz no han terminado de crecer totalmente (sobre todo hay que estar seguros de que el tabique nasal esté totalmente desarrollado).
A parte de estas limitaciones, se puede modificar prácticamente cualquier cosa en la nariz del paciente: tamaño, anchura y forma. Se puede mejorar el perfil de esta, haciéndolo más recto; se puede modificar únicamente la punta para hacerla más redondeada o más puntiaguda; se puede cambiar forma y posición de las fosas; se puede cambiar el ángulo del tabique si este está doblado; etcétera.
¿Hay riesgos en este tipo de cirugía?
En cualquier operación existen riesgos, y en la rinoplastia no iba a ser menos. Pero tranquilo, la operación de nariz tiene un altísimo porcentaje de satisfacción y casi nunca se producen complicaciones.Es esencial que conozcas y que te expliquen bien los cuidados postoperatorios, pues un mal cuidado puede traducirse en irregularidades, malformaciones o incluso desviaciones del tabique. Como en otras operaciones puede haber infecciones, sangrados o reacciones a la anestesia. También pueden aparecer pequeñas venas en la zona de piel afectada, que irán desapareciendo progresivamente con el tiempo. Además, pueden producirse inflamaciones bastante serias en algunos casos.
Las cicatrices estarán por dentro de la nariz, nunca por fuera a no ser que se trate de un caso muy especial (paciente que ha sufrido un accidente por ejemplo). Puede que algunas de estas cicatrices requieran de algún cuidado especial para que cicatrice correctamente.
Intervención
Para empezar, en la intervención se pueden utilizar casi todo tipo de anestesias: general, local y sedación. Todo dependerá de las características de la operación y de la propia decisión del cirujano.La operación de nariz suele durar entre 60 y 120 minutos dependiendo de la finalidad y zonas implicadas, pudiendo ser menor o mayor tiempo.
Encontramos dos tipos de intervención bien definidas:
- Cerrada: Es el tipo de operación más común actualmente, consistente en realizar todo el proceso a través de los orificios nasales haciendo los cortes e incisiones necesarias. De esta manera no quedarán cicatrices en el exterior, sino en el interior, dejando la nariz perfectamente limpia y sin malformaciones. A pesar de lo que se pueda pensar, con esta técnica se puede llegar a partes muy profundas del interior de la nariz con gran precisión.
- Abierta: Se realiza en casos realmente complicados. Se realiza mediante una incisión en la columela (parte situada entre las dos fosas nasales), pudiendo el cirujano llegar a más partes que en una operación de tipo cerrada. Es probable que en este tipo de intervención quede alguna cicatriz visible, aunque pequeña.
