Después de realizar la operación se nos coloca una escayola para mantener la forma de la nariz operada, teniendo que llevarla el tiempo que se nos indique (varía mucho dependiendo de las características de la operación). Las primeras horas es recomendable permanecer tumbado hacia arriba para que la nariz no sufra movimientos bruscos, golpes u otras acciones que pueden hacer peligrar su forma.
La primera semana se recomienda reposo y descanso para que la recuperación sea normal y la cicatrización siga un proceso correcto. Además, lo normal es tener un hinchazón que irá rebajando su tamaño durante esta semana. Una vez pasados los 7 días ya podremos hacer vida normal, teniendo precauciones intentando no tener golpes.
En muchas ocasiones se pondrán tapones en los orificios nasales para bloquear posibles sangrados (bastante comunes) que se retirarán a los 2 días habitualmente. Es normal padecer dolores los primeros días, incluso mareos, pero si persisten durante más tiempo es recomendable acudir al médico para que nos recete un medicamento especial.
Un punto muy importante a tener en cuenta es que debido a la inflamación o hinchazón no veremos los resultados esperados de forma inmediata sino que tendremos que esperar unos días (en algunos casos hasta un par de semanas) para que la hinchazón baje y veamos el resultado al natural. Muchas personas se alarman al ver una nariz hinchada, muy lejos de lo que esperaban, pero es simplemente debido a la inflamación postoperatoria.
